La Inteligencia Emocional en la Educación
Cuando hablamos de inteligencia emocional hablamos de la capacidad de los seres humanos para conocer y controlar las emociones.
Esta nos ayuda a ser conscientes de nuestras emociones y aprender a controlarlas.
Para poder educar en este campo es necesario tener en cuenta una serie de consejos.
Desde bien pequeños será necesario enseñar a los niños a reconocer las emociones, ponerles nombre y conseguir que entiendan su verdadero significado. De esta forma podemos ayudarles a resolver los conflictos respecto a ellas.
También es bueno transmitirles que es normal sentirse ya sea de una forma o de otra. Que no tienen porque ocultarlo. Hay que hacerles entender que no deben esconderse al llorar o sentir vergüenza porque estén tristes. Para ello deben saber que comunicarse es el primer paso para aprender a controlar nuestras emociones.
Sin olvidarse en ningún caso de la escucha. Comprender o entender como se sienten lo demás también puede ayudarnos a aprender que existen miles de formas de sentirse y conociéndolas todas podrán enfrentarse a ellas.
Para conseguir todo ello también es bueno establecerles metas y darles pie a ellos mismos para que puedan fijarse objetivos, que conozcan sus límites y sepan que camino buscar para encontrar sus propias motivaciones.
Y por último pero no menos importantes, hay que enseñarles a decir que no.